feed

SSR

miércoles, 25 de mayo de 2016

ISHISHCHA INTERVIÚ : ::. "Oswaldo Reynoso me enseño a entender que en la belleza y sensualidad de los jóvenes peruanos brilla el poder milenario de nuestras culturas"


Jorge Vargas Prado es el culpable de la última encarnación transónica andina, Ishishcha. Ha publicado hace algunas semanas su primer álbum, "Na", vía Superspace Records del Cono Norte de Lima. Un disco pletórico de paisajes etéreos, preciosistas y electrónicos por doquier donde sus dulces vocalizaciones en nuestro milenario runa simi/quechua apuntan a lo más profundo del alma de miles, millones de compatriotas de hoy y siempre. Una real gema de puro oro sinusoidal que Jorge parece decidido cancelar. (¡!) Ishishcha/Jorge Vargas proviene de Cuzco en la serranía peruana -el centro del mundo aún hoy para millones- y ha tenido la gentileza de concedernos una entrevista exclusiva para los fans del blog y su música. Con ustedes y sin más non sense Ishishcha en Perú Avantgarde.

Tu primer disco, publicado hace poco por Superspace Records, “Na”, deja ver que tienes experiencia en la construcción de paisajes sonoros y la llamada electrónica de dormitorio, las piezas lucen una excelente factura. ¿Cuéntanos cómo fueron tus inicios en la música alterna? ¿Qué proyectos tienes o has tenido antes de Ishishcha?


Estudié Literatura y Lingüística en la UNSA de Arequipa. Junto a algunos compañeros de facultad y muchachos de Ciencias de la comunicación abrimos una tienda alternativa de libros, discos y ropa que se llamó El niño oxidado. Algunos de estos muchachos me enseñaron grupos islandeses que para mí fueron toda una revelación: Sigur rós, Amiina y múm. Tener de referencia a proyectos de música experimental peruanos como Evamuss o Rayobac y escuchar a los islandeses fue el detonante. Así me interesé en la música alternativa que se hacía en esos momentos en Perú: Paulo Novoa, Tonka, Space bee. Todo este descubrimiento musical era acompañado por la formación académica que recibía en la Escuela de Literatura y que me hizo entender lo grave de nuestra época y lo difícil que es para el Perú librarse de todo el imaginario colonial. Mi acercamiento al idioma quechua era ya muy significativo en esa época. 


El 2010 pude comprarme una MacBook Pro y descubrí el programa Garageband. Allí hice mi primer tema como Ishishcha: Michaelpa takin o La canción de Michael. Luego hice un taller gratuito con el artista austriaco Klaus Filip creador del software ppooll. Ishishcha, entonces, estuvo completo.


Actualmente, soy parte de la banda Chintatá. Tocamos algo así como rock progresivo con bases andinas, afro-peruanas y amazónicas. Cantamos en quechua, en castellano y en taushiro. Somos todos muy amigos dentro de la banda. Ellos le dan un sentido inmenso a mi vida. Con ellos soy extremamente feliz.

¿Qué significa Ishishcha? ¿Cómo aprendiste el runa simi y/o quechua?

 
Ishishcha, o en quechua: isischa, es una palabra con la que se llama la atención de los perros. Yo tengo un vinculo inmenso con los perros desde siempre. Me marcó mucho la compañía de mi perro Duque, un clásico ch’aku cusqueño: pequeño, lanudo, crespo. El término fonético ishishcha me pareció siempre muy dulce y muy difícil de pronunciar para los que no saben quechua. Con respecto al quechua, como todos los cusqueños, tuve una relación desde recién nacido con el idioma. Mi abuelita siempre lo hablaba, algunos de sus hijos lo entendían y yo ya no lo aprendí como primera lengua. Mi primer curso de quechua lo llevé en la Escuela de Literatura de la UNSA donde es obligatorio el primer año. Luego, ya nada me detuvo. Regresé a Cusco con 3 cursos de quechua encima a hablar con mi abuelita y con mis amigos. Así he ido mejorando.


El sonido de Ishishcha podría ser emparentado al de grupos de indietrónica de los dos miles como Isan y, sobre todo, los islandeses múm. ¿Has oído estos proyectos? ¿Fue algo realizado premeditadamente o encontraste las similitudes a estas bandas a posteriori?

Como te contaba, múm ha sido uno de mis principales referentes. Los grupos islandeses que mencioné tienen en común el uso del metalófono que es un instrumento bellísimo. Yo relaciono mucho el sonido del metalófono con la nieve y en los Andes la nieve se nos está acabando. Para mí, el metalófono es la infancia y la dulzura. El sonido del metalófono está presente también en Chintatá. Mientras te respondo esto, estoy escuchando a Isan y me encanta y me alegra un montón que le encuentres algo de similitud con Ishishcha.

¿Qué es lo que quieres transmitir con tu arte, música?

Yo intento ser sumamente sincero conmigo mismo. Ishishcha es como soy yo. Un joven que se siente parte del mundo quechua en la ciudad, que entiende que en la permanencia de los idiomas originarios se encuentran muchas claves para salvar el mundo, que se sintió hondamente desordenado, que está fascinado por las estrellas. Quiero mostrar que el mundo andino es muy complejo, variado y puede expresarse de maneras sumamente específicas desde la ciudad.




¿Cómo es la escena de electrónica en Cuzco y regiones cercanas? ¿Qué otros proyectos o bandas nos puedes recomendar?

Creo que el festival Asimtria impulsado desde Arequipa por Marco Valdivia, y que luego repercutió en Cusco, tiene mucho que ver con que ambas ciudades tengan proyectos de música experimental y arte sonoro llamativos e interesantes. Para serte sincero, siento que conozco aún poco de esta escena que es mucho más fuerte de lo que muchos creen. De Cusco me gustaría mencionar a Ce Paiva que tiene varios proyectos de música rara y actualmente mantiene uno llamado Cíclica. Lo mismo ocurre con Anthony Paucarmayta que tiene otros varios proyectos como Tr1no o ALQBSS. Mr. Puka y Fabricio Cavero Farfán me gustan mucho también. El primero a veces hace música convencional y otras veces hace paisajes sonoros.  Fabricio hace cosas muy raras con su viola y unos aparatos sofisticados.  Hay un músico que es un referente en la ciudad y que está más vinculado al hemisferio culto y académico de la música, su nombre es Elder Olave y lo he visto hacer música concreta increíble. Hay que ponerle atención también al nuevo colectivo Haqe punku que hace cosas experimentales interdisciplinarias. Lo que me emociona es que, ya sea en sus facetas como músicos de experimento o en otros proyectos más convencionales, todos los artistas que te menciono entienden que nuestras raíces musicales andinas son importantes y las reinterpretan musicalmente sin miedo.

¿De qué van las líricas de tus canciones?

Ishishcha es un proyecto que cuenta sobre mi vida amorosa que es un fracaso. Por eso todas las canciones tienen nombres de muchachos. Yo he sufrido mucho de fobia social. A veces no podía mantener una conversación casual con alguien sin enrojecer o sudar, incluso si esas personas fueran mis amigos. Esa situación me hizo sufrir mucho durante toda mi vida. Creí que nunca podría tener citas sin ponerme así de nervioso o así de asustado. Aún me pasa, pero con mucho menos frecuencia y si me pasa, me importa un bledo. Por eso las primeras canciones de Ishishcha tienen partes sumamente desordenadas y disonantes. Luego hablo del mismo fracaso, pero ya no debido a mí, sino debido a que para muchos chicos es difícil asumir sus impulsos románticos o sexuales hacia otros chicos sin que eso les cause conflictos. Las letras dicen cosas como: “Te busco en la televisión y al no poder encontrarte, regreso llorando” o “Dios escucha con alegría las canciones de huayno. Y tú, que cargas el mundo en la espalda, eres como una hermosa canción de huayno. Abrázame otra vez, como las nubes abrazan a los Apus”.

Hemos visto por tus publicaciones en Facebook que escribes poesía y tienes incluso un texto publicado. Cuéntanos más ese respecto por favor, ¿qué autores te fascinan?

Sí. Como te contaba soy Licenciado en Literatura y Lingüística. La literatura ha sido lo que ha movido mi vida durante mucho tiempo. Ahora prefiero ser un lector voraz que un escritor. He publicado en papel 4 libros y en internet 3. Por si a alguien le interesa, les dejo mi blog donde están poemas que me gustan y donde también están todos mis libros para ser descargados gratuitamente: www.perrodenieve.tumblr.com. Sin embargo, estoy en un momento en el que desconfío de las cosas que se hacen individualmente. Conocer cada vez más el mundo andino o trabajar con los muchachos de Chintatá me ha hecho sospechar que el futuro es la comunidad. Creo que lo que se hace en comunidad tiene más poder transformador sobre la situación actual del mundo. Hacer las cosas en equipo es hermoso. Con respecto a escritores, estoy sumamente triste. Hoy ha muerto Oswaldo Reynoso, escritor al que conocí personalmente y del que aprendí muchísimo. Lo que escribo, básicamente tiene de él, de Manuel Scorza y de César Moro. Oswaldo Reynoso me enseñó a entender que en la belleza y sensualidad de los jóvenes peruanos brilla el poder milenario de nuestras culturas.


¿Cómo sientes el vivir en los Andes comparado a residir en la costa o en Lima? Quizás hay mucho de ingenuidad en cuanto a lo indígena, quiero decir al final todos somos seres humanos y por ejemplo recuerdo haber visto, en viajes a Markahuasi incluso, a los hermanos del Ande desparramados en las calles de tanto haberse embriagado la noche anterior. ¿Qué diría un miembro del Taqui Onccoy si presenciara ello o cómo sus paisanos rezan y festejan en ritos y festividades cristianos supuestamente fusionados con lo autóctono?

Parece que desde que llegaron los españoles a Lima le molesta el ande y, claro, también la Amazonía. Hay una incapacidad absoluta de entendernos, de entender nuestra visión y nuestra manera de vivir. Todo lo que se sale de los cánones culturales de occidente despierta sospecha y fastidio. Entre Lima y los andes, creo que nunca hemos compartido una visión de futuro similar, nunca. Lo más triste es que Lima siempre ha decidido sobre nosotros, enriqueciéndose con nuestros recursos. Nosotros no queremos el tipo de desarrollo que una parte del país quiere. Yo no puedo entender cómo será vivir sin tener arraigo. Las canciones que nosotros escuchamos en la calle en Cusco, por poner un ejemplo, comparten varios siglos con este pedazo de tierra y han intentado ser desaparecidas, silenciadas. Sin embargo, son tan poderosas que nadie las podrá callar. El sentimiento andino, la cosmovisión andina no desaparece aunque venga envuelta en post-rock, música experimental o arte sonoro. Creo que es momento de discutir con seriedad la posibilidad de luchar por una autonomía del sur andino. Esto ya me parece insostenible. Las cosas para nosotros los andinos no han cambiado casi nada desde la colonia. Nos siguen maltratando, nos siguen escupiendo, nos siguen manteniendo en la pobreza y, lo más asqueroso, nos siguen robando los recursos naturales. Enterarme de todo lo que ha implicado nuestra independencia, de la cantidad de muertos, del tremendo esfuerzo que el mundo andino tuvo que hacer para independizarnos de España, pero sobre todo, enterarme que desde siempre Lima nos ha dado la espalda, me llena de indignación. Hay varios intelectuales y artistas cusqueños que están dispuestos a trabajar en ese sentido, en la autonomía del sur andino. Quizás no hablo de Lima, en definitiva, no hablo de los 11 millones de personas que viven en Lima. Hablo de los gobernantes, de los poderosos, que son los mismos desde la colonia. Espero que esto no se me malinterprete. 

Menciónanos, please, 10 discos que consideres fundamentales o te hayan quebrado el  cerebro.


Tengo un problema, no me descargo la música por discos. Mencionaré canciones que relaciono a Ishishcha o algo así. Estoy un poco confundido. 


•    Inní mer syngur vitleysingur - Sigur Rós
•    Danza ondulante (Delirios krónicos) - Evamuss
•    Don’t be afraid, you just have your eyes closed - múm
•    Ugla - Amiina
•    Flóð - For a minor reflection
•    Mix qhaswas - Rosita de Espinar
•    Avionchay - Gualberto Apaza
•    Eureka - Sankanaction

¿Cuáles son los próximos pasos que darás con Ishishcha? ¿Nuevos lanzamientos, conciertos, intervenciones, videos?

Ishishcha es un proyecto que ha terminado. Yo hice este proyecto sencillamente porque necesitaba curarme. De pronto, se hizo un poquito conocido y mi entusiasmo creció. Luego el ego me ganó la batalla. Creo que con la pequeña atención que ahora viene ganando este proyecto, la creación se relacionaría más a satisfacer mi ego. La esencia de este proyecto se ha acabado. Pienso subir las canciones de NA a Spotify y eso será todo. Si vuelvo a componer algo, lo haré para trabajarlo en conjunto y ojalá que pueda trabajarlo con Chintatá.

Gracias por concedernos la entrevista Jorge, si deseas agregar algo este sería el momento. Esperamos que sigas componiendo más gemas con Ishishcha.

Sólo quiero agradecerte a ti, Wilder por todo lo que estás haciendo por Ishishcha y por la música experimental del Perú. Yo valoro mucho tu apoyo, tu cariño, tu talento y tu trabajo. A través de ti estoy conociendo música maravillosa que me cura y me hace confiar en que las cosas podrán ser mejor. Amas con intensidad lo que haces, vives haciendo lo que amas y eso debería ser inspiración para cualquiera.



No hay comentarios.:

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

SUPPORT PERU AVANTGARDE////APOYA LA AVANZADA PERUVIANA

PROMO DEL CD DE FRACTAL

barbarismos

barbarismos
El Comité empezó a ser acosado por la policía. Hipólito Salazar, que había fundado la Federación Indígena Obrera Regional Peruana, fue deportado. Urviola enfermó de tuberculosis y falleció el 27 de enero de 1925. Cuando enterraron a Urviola varios dirigentes de la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo no pudieron asistir a su velatorio en el local de la Federación de Choferes, en la calle Sandia. El sepelio fue multitudinario. Los ejércitos particulares de los hacendados se dedicaron a quemar las escuelas que el Comité había abierto en diversos puntos del interior del Perú y persiguieron también a sus alumnos y profesores. Antes de la sublevación de Huancané de 1923, fusilaron a tres campesinos de Wilakunka solo porque asistían a una de estas escuelas. El año siguiente, durante una inspección que realizó a las comunidades de Huancané, el Obispo de Puno, Monseñor Cossío, constató la acción vandálica de los terratenientes que habían incendiado más de sesenta locales escolares. No contentos con quemar las escuelas que organizaba el Comité y asesinar a sus profesores o alumnos, los gamonales presionaron a las autoridades locales para que apresen a los delegados indígenas y repriman a los campesinos que los apoyaban. Entre 1921 y 1922, diversos prefectos y subprefectos perpetraron crímenes y atropellos. Hubo casos donde fueron los mismos gamonales los que se encargaron de asesinar a los delegados de la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo. Domingo Huarca, delegado de los comuneros de Tocroyoc, departamento del Cusco, quien había estado en Lima tramitando memoriales, fue brutalmente asesinado. Los gamonales primero lo maltrataron, después le sacaron los ojos y finalmente lo colgaron de la torre de una iglesia. Vicente Tinta Ccoa, del subcomité de Macusani, en Puno, que fue asesinado por los gamonales del lugar. En agosto de 1927, la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo dejó de funcionar luego que, mediante una resolución suprema, el gobierno de Leguía prohibió su funcionamiento en todo el país. Gran parte de la promoción de líderes indígenas que se forjó con la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo engrosó los nuevos movimientos sociales que iban a desembocar en la formación del Partido Comunista y el Partido Aprista. Fueron los casos de Ezequiel Urviola, Hipólito Salazar y Eduardo Quispe y Quispe, que fueron atraídos por la prédica socialista de José Carlos Mariátegui; o de Juan Hipólito Pévez y Demetrio Sandoval, que se acercaron a Víctor Raúl Haya de la Torre y el Partido Aprista. En 1931, después del derrocamiento de Leguía y la muerte de Mariátegui, el Partido Socialista, convertido en Partido Comunista, lanzó la candidatura del indígena Eduardo Quispe y Quispe a la Presidencia de la República. HÉCTOR BÉJAR.

...

...

realismo capitalista peruano, ¡ja, ja!

rojo 2

es más fácil imaginarse el fin del mundo que el fin del capitalismo

En tercer lugar, un dato: una generación entera nació después de la caída del Muro de Berlín. En las décadas de 1960 y 1970, el capitalismo enfrentaba el problema de cómo contener y absorber las energías externas. El problema que posee ahora es exactamente el opuesto: habiendo incorporado cualquier cosa externa de manera en extremo exitosa, ¿puede todavía funcionar sin algo ajeno que colonizar y de lo que apropiarse? Para la mayor parte de quienes tienen menos de veinte años en Europa o los Estados Unidos, la inexistencia de alternativas al capitalismo ya ni siquiera es un problema. El capitalismo ocupa sin fisuras el horizonte de lo pensable. Jameson acostumbraba a detallar con horror la forma en que el capitalismo penetraba en cada poro del inconsciente; en la actualidad, el hecho de que el capitalismo haya colonizado la vida onírica de la población se da por sentado con tanta fuerza que ni merece comentario. Sería peligroso y poco conducente, sin embargo, imaginar el pasado inmediato como un estado edénico rico en potencial político, y por lo mismo resulta necesario recordar el rol que desempeñó la mercantilización en la producción de cultura a lo largo del siglo XX. El viejo duelo entre el détournement y la recuperación, entre la subversión y la captura, parece haberse agotado. Ahora estamos frente a otro proceso que ya no tiene que ver con la incorporación de materiales que previamente parecían tener potencial subversivo, sino con su precorporación, a través del modelado preventivo de los deseos, las aspiraciones y las esperanzas por parte de la cultura capitalista. Solo hay que observar el establecimiento de zonas culturales «alternativas» o «independientes» que repiten interminablemente los más viejos gestos de rebelión y confrontación con el entusiasmo de una primera vez. «Alternativo», «independiente» yotros conceptos similares no designan nada externo a la cultura mainstream; más bien, se trata de estilos, y de hecho de estilos dominantes, al interior del mainstream.
Nadie encarnó y lidió con este punto muerto como Kurt Cobain y Nirvana. En su lasitud espantosa y su furia sin objeto, Cobain parecía dar voz a la depresión colectiva de la generación que había llegado después del fin de la historia, cuyos movimientos ya estaban todos anticipados, rastreados, vendidos y comprados de antemano. Cobain sabía que él no era nada más que una pieza adicional en el espectáculo, que nada le va mejor a MTV que una protesta contra MTV, que su impulso era un cliché previamente guionado y que darse cuenta de todo esto incluso era un cliché. El impasse que lo dejó paralizado es precisamente el que había descripto Jameson: como ocurre con la cultura posmoderna en general, Cobain se encontró con que «los productores de la cultura solo pueden dirigirse ya al pasado: la imitación de estilos muertos, el discurso a través de las máscaras y las voces almacenadas en el museo imaginario de una cultura que es hoy global». En estas condiciones incluso el éxito es una forma del fracaso desde el momento en que tener éxito solo significa convertirse en la nueva presa que el sistema quiere devorar. Pero la angustia fuertemente existencial de Nirvana y Cobain, sin embargo, corresponde a un momento anterior al nuestro y lo que vino después de ellos no fue otra cosa que un rock pastiche que, ya libre de esa angustia, reproduce las formas del pasado sin ansia alguna.
La muerte de Cobain confirmó la derrota y la incorporación final de las ambiciones utópicas y prometeicas del rock en la cultura capitalista. Cuando murió, el rock ya estaba comenzando a ser eclipsado por el hiphop, cuyo éxito global presupone la lógica de la precorporación a la que me he referido antes. En buena parte del hip hop, cualquier esperanza «ingenua» en que la cultura joven pueda cambiar algo fue sustituida hace tiempo por una aceptación dura de la versión más brutalmente reduccionista de la «realidad». «En el hip hop», escribió SimonReynolds en su ensayo de 1996 para The Wire :
«Lo real» tiene dos significados. En primer lugar, hace referencia a la música auténtica que no se deja limitar por los intereses creados y se niega a cambiar o suavizar su mensaje para venderse a la industria musical. Pero «real» también es aquella música que refleja una «realidad» constituida por la inestabilidad económica del capitalismo tardío, el racismo institucionalizado, la creciente vigilancia y el acoso sobre la juventud de parte de la policía. «Lo real» es la muerte de lo social: es lo que ocurre con las corporaciones que, al aumentar sus márgenes de ganancia, en lugar de aumentar los sueldos o los beneficios sociales de sus empleados responden […] reduciendo su personal, sacándose de encima una parte importante de la fuerza de trabajo para crear un inestable ejército de empleados freelance y demedio tiempo, sin los beneficios de la seguridad social.


MARK FISHER.

perú post indie

Haz el ejercicio de pasear una tarde por la plaza del Cuzco, siéntate a la vera de su fuente y distinguirás entre cuzqueños, entre las decenas de argentinos hippies (muchos realmente insoportables), unos cuantos chilenos y de esa pléyade de "gringos" -que vienen dispuestos a ser estafados, bricheados, etc-, a unos curiosos especímenes: los limeños.
Contrariamente a lo que creemos los hijos de esta tierra, lo primero que nos delatará será nuestro "acento". Sí, querido limeño, tenemos acento, un acentazo como doliente, como que rogamos por algo y las mujeres, muchas, además un extraño alargamiento de la sílaba final. Pero lo que realmente suele llamarme la atención es la manera como nos vestimos para ir al Cuzco, porque, el Cuzco es una ciudad, no el campo. Tiene universidades, empresas, negocios, etc. Siin embargo, casi como esos gringos que para venir a Sudamérica vienen disfrazados de Indiana Jones o su variante millenial, nosotros nos vestimos como si fuésemos a escalar el Himalaya. Ya, es verdad que el frío cuzqueño puede ser más intenso que el de la Costa -aunque este invierno me esté haciendo dudarlo- pero echa un vistazo a todo tu outfit: la casaca Northfake, abajo otra chaquetilla de polar o algo así de una marca similar, las botas de montañista, tus medias ochenteras cual escarpines, todo...
Y es que esa es la forma como imaginamos la Sierra: rural, el campo, las montañas, aunque en el fondo no nos movamos de un par de discotecas cusqueñas. Es decir, bien podrías haber venido vestido como en Lima con algo más de abrigo y ya; pero no, ir al Cuzco, a la sierra en general es asistir a un pedazo de nuestra imaginación geográfica que poco tiene que ver con nuestros hábitos usuales del vestido, del comportamiento, etc. Jamás vi en Lima a nadie tomarse una foto con una "niña andina" como lo vi en Cuzco y no ha sido porque no haya niños dispuestos a recibir one dollar por una foto en Lima, pero es que en Cuzquito (cada vez que escucho eso de "Cuzquito" me suda la espalda) es más cute. Ahora, sólo para que calcules la violencia de este acto, ¿te imaginas que alguien del Cuzco -Ayacucho, Huancavelica, Cajamarca o hasta de Chimbote- viniese y te pidiera tomarse una foto con tu hijita, tu sobrino, o lo que sea en Larcomar para subirlo a Instagram o al Facebook? ¿Hardcore, no?


FRED ROHNER
Historia Secreta del Perú 2

as it is when it was

sonido es sonido

sonido es sonido

pura miel

nogzales der wil

RETROMANÍA

"...Pero los 2000 fueron también la década del reciclado rampante: géneros del pasado revividos y renovados, material sonoro vintage reprocesado y recombinado. Con demasiada frecuencia podía detectarse en las nuevas bandas de jóvenes, bajo la piel tirante y las mejillas rosadas, la carne gris y floja de las viejas ideas... Pero donde lo retro verdaderamente reina como sensibilidad dominante y paradigma creativo es en la tierra de lo hipster, el equivalente pop de la alta cultura. Las mismas personas que uno esperaría que produzcan (en tanto artistas) o defiendan (en tanto consumidores) lo no convencional y lo innovador: ese es justamente el grupo más adicto al pasado. En términos demográficos, es exactamente la misma clase social de avanzada, pero en vez de ser pioneros e innovadores han cambiado de rol y ahora son curadores y archivistas. La vanguardia devino en retaguardia." SIMON REYNOLDS Retromanía

kpunk

las cosas como son

las cosas como son

las cosas como son II

las cosas como son II