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viernes, 17 de mayo de 2019

RUEDA RADIOFÓNICA/MÚLTIPLEX :. Entrevista a Jorge Muñiz


Las entrevistas con quienes han conducido programas de radio en las diferentes épocas de la radiodifusión peruana continúa. Aclaro que no es adrede que la mayoría de ellos hayan tenido que ver con la ya mítica Radio Miraflores. Se publica según el orden de llegada. Así, al momento en que Jorge Muñiz participaba como expositor en un importante evento en Panamá, es que logro el contacto y gracias a nuestro amigo en común: Javier Lishner. Muy afable él, como siempre lo conocí y con llamadas telefónicas durante dos semanas y coordinaciones desde Toronto, su actual residencia, es como se concreta lo que sigue a continuación.

X: HELENE RAMOS


¿Cómo empezó todo ello en cuanto a tus inicios en la locución?

Cuando estaba en cuarto de secundaria en el Colegio La Salle, prácticamente me apropié de los parlantes del colegio y de la sala de transmisión desde donde se realizaban los anuncios durante la formación de los estudiantes. Como tenía  una colección de discos de vinilo bastante decente, en casa (la cual originalmente pertenecía a mi madre), incluidos los primeros discos de The Beatles, The Rolling Stones, Sandro, Los Iracundos, Los Gatos y Los Ángeles Negros, podía  preparar una programación musical que difundía  durante los recreos. Los hermanos de La Salle, nunca me prohibieron nada ni en cuestión de elección musical o de los diversos anuncios que semanalmente iban aumentando gracias a la popularidad de nuestra pequeña emisora escolar y a las próximas elecciones escolares como a la obligada organización de fondos para la fiesta de promoción. Igualmente, visitaba cuando podía los estudios de Radio Miraflores donde tenía algunos amigos. Estaba tanto tiempo en la radio que para mi confirmación, le pedí a Beto Cruz (uno de los locutores más populares de la emisora por esos años) que fuera mi padrino. Cuando tenia 15 años, me enteré de que Radio Miraflores se preparaba para una convocatoria de nuevos locutores y postulé junto a varios muchachos que tenían la misma ilusión de tener un programa de radio. Me preparé para dicho concurso de una forma olímpica. Luego de varias semanas escribiendo mis ideas y eventualmente haciendo grabaciones, entrevistas con la dirección de la emisora, conduciendo un programa durante el fin de semana y finalmente gracias a la votación del público oyente, gané una posición entre los nuevos locutores que RM eligió para formar parte de su plantel. Estuve en Radio Miraflores por siete años aproximadamente. Luego me mudé al Cusco y trabajé dos años en Stereo Sur FM. Al regresar a Lima tuve conversaciones con algunas emisoras locales y estuve muy cerca de entrar en el equipo de Super FM pero no llegamos a un acuerdo económico. Al poco tiempo comencé a envolverme muy activamente en el mundo de los sets de filmación ya que era un romance que quería experimentar y mi vida profesional cambió. Obviamente fue un romance intenso ya que actualmente a eso me dedico, al cine. Pero a pesar de disfrutar muchísimo mi trabajo actual, reconozco que mi gran e incondicional amor es la radio. En ese sentido tengo el corazón dividido. Para decirlo de manera simple, el cine es mi pasión… la radio es mi fibra.

¿Quién ha sido tu más grande inspiración para que te dediques a ese oficio de la palabra? ¿Qué personaje radial peruano merece tu respeto a través de los años?

Yo llegué a vincularme con  el universo radial porque quería ser como Dante Capella y me quedé por que quería convertirme en una versión de Hugo Salazar, que trabajaba en Radio Miraflores. Ambos tenían características que yo admiraba como un estilo sólido y sobrio pero a la vez cálido y comunicativo con la audiencia. Eran originales y no se copiaban de nadie. Otra influencia y ejemplo difícil de comparar con el resto de los colegas de la época sería la descomunal presencia de Don Pedro Roncallo, cuya voz está muy presente en la banda sonora de mi vida. También tuve un rincón en mi alma guardado para una locutora a la que nunca llegué a conocer personalmente, Anita Rojas, directora y conductora del segmento educativo llamado El Buho Metiche y del que todavía recuerdo claramente algunos programas de los cuales ahora paso algunas enseñanzas a mi hija. Con Nelly Mendivil Castro aprendí a valorar la música criolla y a admirar a muchos de sus intérpretes con el mismo respeto que admiraba a las super stars de la música moderna. Toda esa compañía fue importante para un muchacho en el último año de secundaria. Por otro lado, todos mis sueños eróticos y románticos de aquellos años eran narrados por la angelical y a la vez intrigante voz de Susana Alcántara de Radio Panamericana FM.

¿Qué ha sido lo más apreciable para ti durante todo el tiempo en que te dedicas o has dedicado a este oficio?

Eso no lo necesito ni pensar. Definitivamente, mantener una amistad de casi cuarenta años con gente increíble como Javier Lishner, Juan Alberto Matta o Sammy Sadovnik. También la conexión  que tuve con muchos de los oyentes que todavía me halagan con su recuerdos. Hace un par de años estaba en una chichería en el Cusco y llegó un trago a mi mesa de un antiguo oyente que me reconoció desde otra mesa. En la selva, durante una gira por la zona con la banda de Miki Gonzales, una chica se llevó a escondidas toda la ropa de mi habitación del hotel donde la banda estaba hospedada, mientras el grupo y yo estábamos promocionando el concierto en las radios de Madre de Dios. Salí a comprar ropa para al menos estar ligeramente presentable para el concierto de la noche. Lamentablemente regresé a mi hotel con una camiseta blanca una talla menor a la mía y unas sandalias de plástico también más pequeñas que mi talla actual. Cuando regresé a mi habitación cual sería mi sorpresa al encontrar absolutamente toda mi ropa lavada, secada al sol, planchada y doblada con olor a flores frescas de la selva y encima de todo, una hermosa nota que decía que lo había hecho porque quería agradecerme de alguna forma por mi programa de radio y, como sabia que estábamos  de gira por muchos días, tal vez no teníamos mucho tiempo para lavar ropa. También me pasó una situación estelar en Toronto hace un tiempo. Yo estaba comiendo solo en un restaurant peruano y se me acercó una pareja del Rímac para preguntarme si yo era el mismo Jorge Muñiz del programa de Radio Miraflores. Hasta se acordaban del jingle de uno de mis shows, RM Exitos. Otra vivencia super ultra mega explosiva me pasó hace algún tiempo en el festival de cine de Panamá. Yo estaba invitado a dar una ponencia de sonido para cine. A ese mismo festival la diosa del avant-garde music, Laurie Anderson estaba invitada para presenter una película experimental que había dirigido. Cuando la conocí conversamos superficialmente de nada importante, como pasa con las conversaciones superficiales hasta que le conté lo de mi trabajo en radio y eso fue suficiente, para estar hablando con semejante personaje tan importante para el mundo del sonido y la música como es Laurie Anderson y por mucho rato. Hasta se apareció en mi clase, lo cual me hizo casi temblar de nervios. Imagínate,  dar una clase sobre sonido con Laurie Anderson en la audiencia. Es como hablar de física nuclear con Albert Einstein. Felizmente, ella venía a despedirse de camino al aeropuerto. También mi trabajo en la radio me sirvió para construir una colección grande e interesante de discos y muchas memorias, la mayoría buenas.

Si pudieras estar eternanente ligado a un año de la escena musical ¿qué año podría ser este?

Pregunta complicada que me crea algunos dilemas. Pienso que alguien como yo que tiene más  pasado que futuro, se puede dar el lujo de querer estar “eternamente ligado” a más de un año de la escena musical. Pero si me das licencia creativa a través del tunel del tiempo, posiblemente sería el año 1977, que es alrededor de la época en que escuché el álbun Rumours de Fleetwood Mac, Sex Pistols producen Never Mind The Bollocks, Queen saca News Of The World, uno de mis discos más queridos de la banda. Conocí a Elvis Costello, Ramones, B52's y The Cars gracias al programa de música  para Latinoamérica que producia la BBC y que dirigía un locutor cuyo nombre radial era simplemente Roger. También creo que fue ese mismo año que salió el álbum en vivo de Sammy Hagar. Los Rolling Stones también experimentaban con un sonido más influenciado por la Disco Music lo cual era interesante y Prince firmó su primer record deal con Warner Bros. cuando tenía 18 años. Hablando de música disco creo que ese año fue la inaguración de Studio 54 y que fue además  la explosión de Donna Summer y especialmente de los Bee Gees con la película Saturday Night Fever, cuya época fue bastante divertida. Hace poco estuve trabajando con el legendario John Badham quien dirigió The Bodyguard, Dracula, War Games y tambien Saturday Night Fever. Fue fantástico pasar varias semanas con él,  hablando y aprendiendo de cine y también conocer como eligió cada una de las canciones de los Bee Gees para armar la banda Sonora de la película. Volviendo a la pregunta, no olvidemos todo lo que Motown Records producía y todas esa combinaciones de jazz, soul, funk y blues que invadían las frecuencias radiales de aquella época. También 1977 fue el año que supe de The Police, a quienes pude ver un par de veces cuando se unieron para una última gira mundial. Ese mismo año se formó gracias al visionario promotor Tony Wilson el sello discrográfico que puso a Manchester en el mapa de la música, Factory Records y también abrió el lugar donde esa misma música era presentada en vivo, La Hacienda Club. Joy Division, The Clash, New Order, Rowetta, Marshall Jefferson, blah, blah, blah etc. Sí, definitivamente 1977. Esa era la ventaja de estar interesado en música que era simplemente buena y no porque perteneciera a un tipo especifico de género musical. Ese fue el año que me convertí en seguidor fiel de radio Miraflores y tomé la decisión de algún día convertirme en locutor de esa radio.


Jorge Muñiz y John Badham


¿Algún estilo musical no obtuvo la atención,que esperabas que sí la obtendría?

El Latin Rock. Me hubiera gustado que hubieran más grupos que exploren como lo hace Carlos Santana y su banda. Por supuesto que hay varios representantes del género, pero no tantos como yo quisiera. ¿Otro estilo que no explotó?, I don’t know, ¿alguién sabe que pasó con el Twist, o con el género Surf Music del sur de California?

¿Qué consideras que no ha obtenido el éxito esperado en el transcurso del tiempo, con los locutores peruanos?

La cuestión financiera. Otra cosa que noto cuando escucho radios del Perú es la automatización de el trabajo del locutor. No con todos, pero siento muy presente la influencia corporativa en el trabajo creativo de muchos programas. Antes, cuando escuchaba radio sentía que cada programa era individual. Me pasa menos ahora.

¿Es que se puede vivir adecuadamente siendo un locutor en el Perú?

Yo no vivo en el Perú, pero supongo que las cosas a pesar de haber mejorado en tecnología y marketing para muchos profesionales de la radio, todavía debe ser muy difícil  mantener una familia con el sueldo de locutor. Posiblemente hay que diversificar con trabajos en publicidad, contratos de animación o buscando clientes alternativos.

¿Qué habilidades hace que un locutor tenga un estilo único?

Sentido común, cercanía con la audiencia, respeto por las opiniones y gustos de la gente que nos hace el honor de escucharnos, buena dicción y conocimiento general de lo que pasa en el mundo. La adecuada programación musical en un radio show, ayuda también.

¿Diferencias tu estilo de locución con la de otros locutores? ¿En que sentido?

Yo acababa de cumplir 16 años cuando comencé. Mi estilo, para llamarlo de alguna forma, era hablarle a la gente de manera casual, escucharlos, dialogar, elegir juntos la música del programa y sobretodo divertirme con la audiencia. Más adelante produje programas donde había más opinión, entrevistas y noticias, entonces mi forma evolucionó a ser un poco más sobria.

¿Cuál es el tema que consideras vigente para ti, a pesar del tiempo transcurrido?

Beast of Burden de los Stones, Do you think I'm sexy de Rod Stewart y Bohemian Rhapsody de Queen. Todas por la calidad de la canción y por la promoción de la película en el caso de la canción de Queen.

¿Qué tema que haya alcanzado el Top 1 consideras insoportable para ti?

Casi todos los Top 1 son insoportables por un ratito, pero luego de un tiempo de silencio, nos reconciliamos y vuelven a ser Top. Básicamente son súper canciones. Es por esa razón que llegan a la cumbre de la lista y que se convierten en temas importantes. Marcan una época.

¿Es que se puede definir el perfil de un locutor x pasar un determinado tipo de música?

Depende el tiempo que el locutor este en el aire. Yo conozco varios cuyo perfil ha ido cambiando con los años y las experiencias. Unos comenzaron como presentadores de música Pop y ahora leen noticias, otros se iniciaron con disco music y ahora son periodistas deportivos, y otros como Gerardo Manuel, que quien haga lo que haga siempre va a ser el Rey del rock. Ahora que lo menciono, Gerardo Manuel (padre) también es responsable de que yo me hubiera enamorado de la radio.

Si tuvieras el poder de abolir un estilo de música ¿cuál de ellos desecharías x toda la eternidad y x siempre jamás?

La verdad es que no creo tener ni la autoridad ni las ganas de abolir ningún género musical. Pienso que todo fluye y termina siendo parte de nuestra realidad. En todo género musical hay cosas rescatables. Hace varios años, estuve trabajando con el rapero Drake. En esa época lo llamaban Aubrey y era actor de televisión. Yo recuerdo sus primeras letras y poemas como la calidad oral y el profesionalismo de este muchacho tan joven y tan buena onda. Él  era un muy dedicado, sensible y talentoso artista. Sinceramente el rap music no es mi género favorito pero cuando escucho a Aubrey, ahora conocido como la mega estrella Drake, escucho las letras y las disfruto mucho. En diciembre estuve asistiendo a un festival de cine en La Habana y en una de las muchas fiestas a la que fui, estuve un buen rato disfrutando y bailando reggaetón. Alucina esa.

A JM, lo conocí en los 80s, cuando era productora textual del programa radial Generación Futura conducido x Giglio Perizzoli y Carlos Olcese, quedándose luego sólo el último de los nombrados. Paralelamente, hacía lo mismo proporcionando datos a esa saga de locutores como Kike Cano Alva, David Lemor, Piero Roncallo y a muchos otros y cuando ni imaginaba que años después conduciría un programa radial x cerca a los 25 años y otros más durante los fines de semana en esa misma emisora. Amigos desde siempre y x esa pasión que nos une: la música. STOP!

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barbarismos

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El Comité empezó a ser acosado por la policía. Hipólito Salazar, que había fundado la Federación Indígena Obrera Regional Peruana, fue deportado. Urviola enfermó de tuberculosis y falleció el 27 de enero de 1925. Cuando enterraron a Urviola varios dirigentes de la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo no pudieron asistir a su velatorio en el local de la Federación de Choferes, en la calle Sandia. El sepelio fue multitudinario. Los ejércitos particulares de los hacendados se dedicaron a quemar las escuelas que el Comité había abierto en diversos puntos del interior del Perú y persiguieron también a sus alumnos y profesores. Antes de la sublevación de Huancané de 1923, fusilaron a tres campesinos de Wilakunka solo porque asistían a una de estas escuelas. El año siguiente, durante una inspección que realizó a las comunidades de Huancané, el Obispo de Puno, Monseñor Cossío, constató la acción vandálica de los terratenientes que habían incendiado más de sesenta locales escolares. No contentos con quemar las escuelas que organizaba el Comité y asesinar a sus profesores o alumnos, los gamonales presionaron a las autoridades locales para que apresen a los delegados indígenas y repriman a los campesinos que los apoyaban. Entre 1921 y 1922, diversos prefectos y subprefectos perpetraron crímenes y atropellos. Hubo casos donde fueron los mismos gamonales los que se encargaron de asesinar a los delegados de la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo. Domingo Huarca, delegado de los comuneros de Tocroyoc, departamento del Cusco, quien había estado en Lima tramitando memoriales, fue brutalmente asesinado. Los gamonales primero lo maltrataron, después le sacaron los ojos y finalmente lo colgaron de la torre de una iglesia. Vicente Tinta Ccoa, del subcomité de Macusani, en Puno, que fue asesinado por los gamonales del lugar. En agosto de 1927, la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo dejó de funcionar luego que, mediante una resolución suprema, el gobierno de Leguía prohibió su funcionamiento en todo el país. Gran parte de la promoción de líderes indígenas que se forjó con la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo engrosó los nuevos movimientos sociales que iban a desembocar en la formación del Partido Comunista y el Partido Aprista. Fueron los casos de Ezequiel Urviola, Hipólito Salazar y Eduardo Quispe y Quispe, que fueron atraídos por la prédica socialista de José Carlos Mariátegui; o de Juan Hipólito Pévez y Demetrio Sandoval, que se acercaron a Víctor Raúl Haya de la Torre y el Partido Aprista. En 1931, después del derrocamiento de Leguía y la muerte de Mariátegui, el Partido Socialista, convertido en Partido Comunista, lanzó la candidatura del indígena Eduardo Quispe y Quispe a la Presidencia de la República. HÉCTOR BÉJAR.

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realismo capitalista peruano, ¡ja, ja!

rojo 2

es más fácil imaginarse el fin del mundo que el fin del capitalismo

En tercer lugar, un dato: una generación entera nació después de la caída del Muro de Berlín. En las décadas de 1960 y 1970, el capitalismo enfrentaba el problema de cómo contener y absorber las energías externas. El problema que posee ahora es exactamente el opuesto: habiendo incorporado cualquier cosa externa de manera en extremo exitosa, ¿puede todavía funcionar sin algo ajeno que colonizar y de lo que apropiarse? Para la mayor parte de quienes tienen menos de veinte años en Europa o los Estados Unidos, la inexistencia de alternativas al capitalismo ya ni siquiera es un problema. El capitalismo ocupa sin fisuras el horizonte de lo pensable. Jameson acostumbraba a detallar con horror la forma en que el capitalismo penetraba en cada poro del inconsciente; en la actualidad, el hecho de que el capitalismo haya colonizado la vida onírica de la población se da por sentado con tanta fuerza que ni merece comentario. Sería peligroso y poco conducente, sin embargo, imaginar el pasado inmediato como un estado edénico rico en potencial político, y por lo mismo resulta necesario recordar el rol que desempeñó la mercantilización en la producción de cultura a lo largo del siglo XX. El viejo duelo entre el détournement y la recuperación, entre la subversión y la captura, parece haberse agotado. Ahora estamos frente a otro proceso que ya no tiene que ver con la incorporación de materiales que previamente parecían tener potencial subversivo, sino con su precorporación, a través del modelado preventivo de los deseos, las aspiraciones y las esperanzas por parte de la cultura capitalista. Solo hay que observar el establecimiento de zonas culturales «alternativas» o «independientes» que repiten interminablemente los más viejos gestos de rebelión y confrontación con el entusiasmo de una primera vez. «Alternativo», «independiente» yotros conceptos similares no designan nada externo a la cultura mainstream; más bien, se trata de estilos, y de hecho de estilos dominantes, al interior del mainstream.
Nadie encarnó y lidió con este punto muerto como Kurt Cobain y Nirvana. En su lasitud espantosa y su furia sin objeto, Cobain parecía dar voz a la depresión colectiva de la generación que había llegado después del fin de la historia, cuyos movimientos ya estaban todos anticipados, rastreados, vendidos y comprados de antemano. Cobain sabía que él no era nada más que una pieza adicional en el espectáculo, que nada le va mejor a MTV que una protesta contra MTV, que su impulso era un cliché previamente guionado y que darse cuenta de todo esto incluso era un cliché. El impasse que lo dejó paralizado es precisamente el que había descripto Jameson: como ocurre con la cultura posmoderna en general, Cobain se encontró con que «los productores de la cultura solo pueden dirigirse ya al pasado: la imitación de estilos muertos, el discurso a través de las máscaras y las voces almacenadas en el museo imaginario de una cultura que es hoy global». En estas condiciones incluso el éxito es una forma del fracaso desde el momento en que tener éxito solo significa convertirse en la nueva presa que el sistema quiere devorar. Pero la angustia fuertemente existencial de Nirvana y Cobain, sin embargo, corresponde a un momento anterior al nuestro y lo que vino después de ellos no fue otra cosa que un rock pastiche que, ya libre de esa angustia, reproduce las formas del pasado sin ansia alguna.
La muerte de Cobain confirmó la derrota y la incorporación final de las ambiciones utópicas y prometeicas del rock en la cultura capitalista. Cuando murió, el rock ya estaba comenzando a ser eclipsado por el hiphop, cuyo éxito global presupone la lógica de la precorporación a la que me he referido antes. En buena parte del hip hop, cualquier esperanza «ingenua» en que la cultura joven pueda cambiar algo fue sustituida hace tiempo por una aceptación dura de la versión más brutalmente reduccionista de la «realidad». «En el hip hop», escribió SimonReynolds en su ensayo de 1996 para The Wire :
«Lo real» tiene dos significados. En primer lugar, hace referencia a la música auténtica que no se deja limitar por los intereses creados y se niega a cambiar o suavizar su mensaje para venderse a la industria musical. Pero «real» también es aquella música que refleja una «realidad» constituida por la inestabilidad económica del capitalismo tardío, el racismo institucionalizado, la creciente vigilancia y el acoso sobre la juventud de parte de la policía. «Lo real» es la muerte de lo social: es lo que ocurre con las corporaciones que, al aumentar sus márgenes de ganancia, en lugar de aumentar los sueldos o los beneficios sociales de sus empleados responden […] reduciendo su personal, sacándose de encima una parte importante de la fuerza de trabajo para crear un inestable ejército de empleados freelance y demedio tiempo, sin los beneficios de la seguridad social.


MARK FISHER.

perú post indie

Haz el ejercicio de pasear una tarde por la plaza del Cuzco, siéntate a la vera de su fuente y distinguirás entre cuzqueños, entre las decenas de argentinos hippies (muchos realmente insoportables), unos cuantos chilenos y de esa pléyade de "gringos" -que vienen dispuestos a ser estafados, bricheados, etc-, a unos curiosos especímenes: los limeños.
Contrariamente a lo que creemos los hijos de esta tierra, lo primero que nos delatará será nuestro "acento". Sí, querido limeño, tenemos acento, un acentazo como doliente, como que rogamos por algo y las mujeres, muchas, además un extraño alargamiento de la sílaba final. Pero lo que realmente suele llamarme la atención es la manera como nos vestimos para ir al Cuzco, porque, el Cuzco es una ciudad, no el campo. Tiene universidades, empresas, negocios, etc. Siin embargo, casi como esos gringos que para venir a Sudamérica vienen disfrazados de Indiana Jones o su variante millenial, nosotros nos vestimos como si fuésemos a escalar el Himalaya. Ya, es verdad que el frío cuzqueño puede ser más intenso que el de la Costa -aunque este invierno me esté haciendo dudarlo- pero echa un vistazo a todo tu outfit: la casaca Northfake, abajo otra chaquetilla de polar o algo así de una marca similar, las botas de montañista, tus medias ochenteras cual escarpines, todo...
Y es que esa es la forma como imaginamos la Sierra: rural, el campo, las montañas, aunque en el fondo no nos movamos de un par de discotecas cusqueñas. Es decir, bien podrías haber venido vestido como en Lima con algo más de abrigo y ya; pero no, ir al Cuzco, a la sierra en general es asistir a un pedazo de nuestra imaginación geográfica que poco tiene que ver con nuestros hábitos usuales del vestido, del comportamiento, etc. Jamás vi en Lima a nadie tomarse una foto con una "niña andina" como lo vi en Cuzco y no ha sido porque no haya niños dispuestos a recibir one dollar por una foto en Lima, pero es que en Cuzquito (cada vez que escucho eso de "Cuzquito" me suda la espalda) es más cute. Ahora, sólo para que calcules la violencia de este acto, ¿te imaginas que alguien del Cuzco -Ayacucho, Huancavelica, Cajamarca o hasta de Chimbote- viniese y te pidiera tomarse una foto con tu hijita, tu sobrino, o lo que sea en Larcomar para subirlo a Instagram o al Facebook? ¿Hardcore, no?


FRED ROHNER
Historia Secreta del Perú 2

as it is when it was

sonido es sonido

sonido es sonido

pura miel

nogzales der wil

RETROMANÍA

"...Pero los 2000 fueron también la década del reciclado rampante: géneros del pasado revividos y renovados, material sonoro vintage reprocesado y recombinado. Con demasiada frecuencia podía detectarse en las nuevas bandas de jóvenes, bajo la piel tirante y las mejillas rosadas, la carne gris y floja de las viejas ideas... Pero donde lo retro verdaderamente reina como sensibilidad dominante y paradigma creativo es en la tierra de lo hipster, el equivalente pop de la alta cultura. Las mismas personas que uno esperaría que produzcan (en tanto artistas) o defiendan (en tanto consumidores) lo no convencional y lo innovador: ese es justamente el grupo más adicto al pasado. En términos demográficos, es exactamente la misma clase social de avanzada, pero en vez de ser pioneros e innovadores han cambiado de rol y ahora son curadores y archivistas. La vanguardia devino en retaguardia." SIMON REYNOLDS Retromanía

kpunk

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