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sábado, 7 de mayo de 2022

Novedades, activismo y +



Halleluwah, broders. Ayer salió mi disco "Contracultura (No al arte falso)" en formato físico CD y virtual en el sello inglés Wormhole Sound Records. ¡Y lo pueden pedir desde ya! Mi último álbum, por su parte, se encuentra ya en todas las plataformas de moda, spotify, itunes, tidal, etc. 





From writing about the internet with Timothy Leary to releasing music under the techno-rock moniker “Mondo Vanili”, R.U. Sirius has shaped digital culture since its inception. He dishes to Lydia Sviatoslavsky about (what’s left of) cyberpunk, stoner-inflected French theory, and the drab cruelty of American politics.

LINK: This Interview is a Mistake | Spike Art Magazine


"Bismarck, en el nuevo Imperio alemán que terminó de construir en 1871, decidió así mismo manipular un electorado amplio en sus batallas contra los liberales. Sería absurdo llamar a estos autoritarios «fascistas», pero eran claramente los primeros que se adentraban en un territorio que los fascistas dominarían más tarde. Al decidirse por manipular a un electorado de masas en vez de restringir el derecho de voto, se apartaron tanto de los conservadores como de los liberales y de la política tal como se practicaba entonces, como un debate ilustrado entre notables elegidos por un público respetuoso para que gobernaran en su nombre.

Los fascistas, a diferencia de los conservadores y de los liberales cautos, nunca quisieron mantener a las masas fuera de la política. Ellos querían reclutarlas, disciplinarlas e insuflarles energía. Al final de la Primera Guerra Mundial, no había ya, de todos modos, posibilidad de volver a un derecho de sufragio limitado. Los jóvenes habían sido reclutados casi en todas partes para morir por su país, y difícilmente se podía negar a ninguno de ellos los plenos derechos de ciudadanía. También a las mujeres, cuyo papel económico y social se había ampliado enormemente con la guerra, se les otorgó el derecho al voto en muchos países del norte de Europa —aunque todavía no en Francia, Italia, España o Suiza—. Aunque los fascistas pretendían restaurar el patriarcado en la familia y en el lugar de trabajo, prefirieron movilizar a las mujeres favorables a ellos en vez de privarlas del derecho devoto, al menos hasta que pudieron abolir por completo las votaciones.

Para que pudiera llegar a ser posible el fascismo tuvo que cambiar también la cultura política europea. La derecha tuvo que reconocer que no podía evitar ya participar en la política de masas.

Facilitó esta transición el que un número creciente de ciudadanos de clase media se incorporase a las filas conservadoras, una vez satisfechas sus limitadas demandas políticas y al concretarse nuevas  demandas amenazadoras de los socialistas. En 1917 —tal vez antes—, el proyecto revolucionario era algo lo suficientemente inmediato como para alejar a gran parte de la clase media de la fidelidad a la izquierda de sus abuelos demócratas de 1848. Los conservadores pudieron empezar a soñar con el control de mayorías electorales.

Las izquierdas democráticas y socialistas, aún unidas en 1848, tuvieron que escindirse para que pudiera llegar a ser posible el fascismo. La izquierda tuvo que perder también su posición como recurso automático de todos los partidarios del cambio: los soñadores y los descontentos, tanto entre la clase media como en la clase obrera. Así pues, el fascismo es inconcebible sin la presencia de una izquierda socialista madura y en expansión. De hecho los fascistas solo pueden hallar su espacio después de que el socialismo ha llegado a hacerse lo bastante poderoso como para haber tenido cierta participación en el Gobierno y haber desilusionado así a una parte de su clientela intelectual y obrera tradicional. Así que podemos situar el fascismo en el tiempo no solo después del  asentamiento irreversible de la política de masas, sino en realidad en un periodo tardío de ese proceso, en el que los socialistas han llegado al punto de participar en el Gobierno… y de estar comprometidos por ello.

El umbral se franqueó en septiembre de 1899, cuando el primer socialista europeo aceptó un cargo en un gabinete burgués, para ayudar a la democracia francesa que estaba siendo atacada durante el affaire Dreyfus, ganándose así la hostilidad de algunos de los puristas morales de su movimiento.

En 1914 parte de los seguidores tradicionales de la izquierda se habían desilusionado por lo que consideraban los compromisos de los socialistas parlamentarios moderados. Después de la guerra,  buscando algo más intransigentemente revolucionario, se pasaron al bolchevismo o, como hemos visto, a través del nacional-sindicalismo, al fascismo."

ROBERT O. PAXTON
"Anatomía del Fascismo"
2019


Hace un par de semanas tmb los de El Paradero organizaron una tocada al aire libre que fue locasa. Acá un par de videos que grabé de Gabriel Castillo ruideando superb y Oscar Recarte en plan ATOM TM. 





REPORTE MATUTINO: Si quieren disfrutar de lo que hacen, llámese profesión u oficio, no escuchen lo que los demás dicen de ustedes. Los otros, aunque con ventajas y privilegios, no tendrán jamás lo que ustedes han logrado con esfuerzo, tiempo y terquead. Por mucho que esa gente trate de imitarlos, jamás se les parecerá ni un ápice. Cada ser humano es único. (INGRID VALENCIA)

"Creo que incluso en el ámbito cultural, más allá de compadrismos y amiguismos, hay una miopía a lo que se hizo de los 90s en adelante (y eso, siendo buena gente)" ARTURO CALDERÓN.
- Prueba de ello es la escasa repercusión en nuestro propio Perú de los 25 años de Crisálida Sónica, Compilación I, tienen q ser desde afuera que hagan textos y entrevistas. Obviando los contactos de mi blog. A SEGUIR.

A propósito del Encuentro de Redes Sono-Sororas Latinoamericanas, esta semana les compartimos la entrevista que tuvimos con Alma Laprida, artista sonora argentina, con quien reflexionamos acerca de los archivos musicales con perspectiva de género. Una nota de nuestro colaborador Charlestone Nava. 💜💚🔊



Joseph Beuys y Conrad Schnitzler (TANGERINE DREAM, KLUSTER) en un restaurante parisino.





Sin embargo, la hibridez está, a causa de su historia conceptual, demasiado vinculada al complejo racista y colonialista de poder, dominio, opresión y resistencia, a la geometría del centro y de los márgenes o de arriba y abajo.

De esta forma, no comprende lo lúdico, que justamente no carga con ese complejo, que abandona así por completo el espacio entre-medio dialéctico del amo y esclavo. La hipercultura no es un espacio libre de poder. No obstante, lo especial del mundo elaborado hiperculturalmente es el incremento del número de espacios que no serían accesibles desde el poder ola economía, sino desde la estética. Estos espacios participarían en el reino del juego y de la apariencia, aquel al que Schiller opone al reino de las fuerzas y de las leyes:

<<En medio del temible reino de las fuerzas naturales, y en medio también del sagrado reino de las leyes, el impulso estético de formación va construyendo, inadvertidamente, un tercer reino feliz, el reino del juego y de la apariencia, en el cual libera al hombre de las cadenas de toda circunstancia y lo exime de toda coacción, tanto física como moral.>>

Este reino del juego y de la apariencia, que también se diferencia del reino del poder, promete más libertad. Su principio fundamental es, de acuerdo con Schiller, dar libertad por medio de la libertad. Este reino será poblado pues por los homines liberi et hilari.

HAN BYUNG CHUL
"Hiperculturalidad"


Larga vida a la meritocracia y la mermelada dices?!?
por cierto, mi próximo álbum sale el 1 de julio!!
koool.

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PROMO DEL CD DE FRACTAL

barbarismos

barbarismos
El Comité empezó a ser acosado por la policía. Hipólito Salazar, que había fundado la Federación Indígena Obrera Regional Peruana, fue deportado. Urviola enfermó de tuberculosis y falleció el 27 de enero de 1925. Cuando enterraron a Urviola varios dirigentes de la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo no pudieron asistir a su velatorio en el local de la Federación de Choferes, en la calle Sandia. El sepelio fue multitudinario. Los ejércitos particulares de los hacendados se dedicaron a quemar las escuelas que el Comité había abierto en diversos puntos del interior del Perú y persiguieron también a sus alumnos y profesores. Antes de la sublevación de Huancané de 1923, fusilaron a tres campesinos de Wilakunka solo porque asistían a una de estas escuelas. El año siguiente, durante una inspección que realizó a las comunidades de Huancané, el Obispo de Puno, Monseñor Cossío, constató la acción vandálica de los terratenientes que habían incendiado más de sesenta locales escolares. No contentos con quemar las escuelas que organizaba el Comité y asesinar a sus profesores o alumnos, los gamonales presionaron a las autoridades locales para que apresen a los delegados indígenas y repriman a los campesinos que los apoyaban. Entre 1921 y 1922, diversos prefectos y subprefectos perpetraron crímenes y atropellos. Hubo casos donde fueron los mismos gamonales los que se encargaron de asesinar a los delegados de la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo. Domingo Huarca, delegado de los comuneros de Tocroyoc, departamento del Cusco, quien había estado en Lima tramitando memoriales, fue brutalmente asesinado. Los gamonales primero lo maltrataron, después le sacaron los ojos y finalmente lo colgaron de la torre de una iglesia. Vicente Tinta Ccoa, del subcomité de Macusani, en Puno, que fue asesinado por los gamonales del lugar. En agosto de 1927, la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo dejó de funcionar luego que, mediante una resolución suprema, el gobierno de Leguía prohibió su funcionamiento en todo el país. Gran parte de la promoción de líderes indígenas que se forjó con la Pro-Derecho Indígena Tahuantinsuyo engrosó los nuevos movimientos sociales que iban a desembocar en la formación del Partido Comunista y el Partido Aprista. Fueron los casos de Ezequiel Urviola, Hipólito Salazar y Eduardo Quispe y Quispe, que fueron atraídos por la prédica socialista de José Carlos Mariátegui; o de Juan Hipólito Pévez y Demetrio Sandoval, que se acercaron a Víctor Raúl Haya de la Torre y el Partido Aprista. En 1931, después del derrocamiento de Leguía y la muerte de Mariátegui, el Partido Socialista, convertido en Partido Comunista, lanzó la candidatura del indígena Eduardo Quispe y Quispe a la Presidencia de la República. HÉCTOR BÉJAR.

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realismo capitalista peruano, ¡ja, ja!

rojo 2

es más fácil imaginarse el fin del mundo que el fin del capitalismo

En tercer lugar, un dato: una generación entera nació después de la caída del Muro de Berlín. En las décadas de 1960 y 1970, el capitalismo enfrentaba el problema de cómo contener y absorber las energías externas. El problema que posee ahora es exactamente el opuesto: habiendo incorporado cualquier cosa externa de manera en extremo exitosa, ¿puede todavía funcionar sin algo ajeno que colonizar y de lo que apropiarse? Para la mayor parte de quienes tienen menos de veinte años en Europa o los Estados Unidos, la inexistencia de alternativas al capitalismo ya ni siquiera es un problema. El capitalismo ocupa sin fisuras el horizonte de lo pensable. Jameson acostumbraba a detallar con horror la forma en que el capitalismo penetraba en cada poro del inconsciente; en la actualidad, el hecho de que el capitalismo haya colonizado la vida onírica de la población se da por sentado con tanta fuerza que ni merece comentario. Sería peligroso y poco conducente, sin embargo, imaginar el pasado inmediato como un estado edénico rico en potencial político, y por lo mismo resulta necesario recordar el rol que desempeñó la mercantilización en la producción de cultura a lo largo del siglo XX. El viejo duelo entre el détournement y la recuperación, entre la subversión y la captura, parece haberse agotado. Ahora estamos frente a otro proceso que ya no tiene que ver con la incorporación de materiales que previamente parecían tener potencial subversivo, sino con su precorporación, a través del modelado preventivo de los deseos, las aspiraciones y las esperanzas por parte de la cultura capitalista. Solo hay que observar el establecimiento de zonas culturales «alternativas» o «independientes» que repiten interminablemente los más viejos gestos de rebelión y confrontación con el entusiasmo de una primera vez. «Alternativo», «independiente» yotros conceptos similares no designan nada externo a la cultura mainstream; más bien, se trata de estilos, y de hecho de estilos dominantes, al interior del mainstream.
Nadie encarnó y lidió con este punto muerto como Kurt Cobain y Nirvana. En su lasitud espantosa y su furia sin objeto, Cobain parecía dar voz a la depresión colectiva de la generación que había llegado después del fin de la historia, cuyos movimientos ya estaban todos anticipados, rastreados, vendidos y comprados de antemano. Cobain sabía que él no era nada más que una pieza adicional en el espectáculo, que nada le va mejor a MTV que una protesta contra MTV, que su impulso era un cliché previamente guionado y que darse cuenta de todo esto incluso era un cliché. El impasse que lo dejó paralizado es precisamente el que había descripto Jameson: como ocurre con la cultura posmoderna en general, Cobain se encontró con que «los productores de la cultura solo pueden dirigirse ya al pasado: la imitación de estilos muertos, el discurso a través de las máscaras y las voces almacenadas en el museo imaginario de una cultura que es hoy global». En estas condiciones incluso el éxito es una forma del fracaso desde el momento en que tener éxito solo significa convertirse en la nueva presa que el sistema quiere devorar. Pero la angustia fuertemente existencial de Nirvana y Cobain, sin embargo, corresponde a un momento anterior al nuestro y lo que vino después de ellos no fue otra cosa que un rock pastiche que, ya libre de esa angustia, reproduce las formas del pasado sin ansia alguna.
La muerte de Cobain confirmó la derrota y la incorporación final de las ambiciones utópicas y prometeicas del rock en la cultura capitalista. Cuando murió, el rock ya estaba comenzando a ser eclipsado por el hiphop, cuyo éxito global presupone la lógica de la precorporación a la que me he referido antes. En buena parte del hip hop, cualquier esperanza «ingenua» en que la cultura joven pueda cambiar algo fue sustituida hace tiempo por una aceptación dura de la versión más brutalmente reduccionista de la «realidad». «En el hip hop», escribió SimonReynolds en su ensayo de 1996 para The Wire :
«Lo real» tiene dos significados. En primer lugar, hace referencia a la música auténtica que no se deja limitar por los intereses creados y se niega a cambiar o suavizar su mensaje para venderse a la industria musical. Pero «real» también es aquella música que refleja una «realidad» constituida por la inestabilidad económica del capitalismo tardío, el racismo institucionalizado, la creciente vigilancia y el acoso sobre la juventud de parte de la policía. «Lo real» es la muerte de lo social: es lo que ocurre con las corporaciones que, al aumentar sus márgenes de ganancia, en lugar de aumentar los sueldos o los beneficios sociales de sus empleados responden […] reduciendo su personal, sacándose de encima una parte importante de la fuerza de trabajo para crear un inestable ejército de empleados freelance y demedio tiempo, sin los beneficios de la seguridad social.


MARK FISHER.

perú post indie

Haz el ejercicio de pasear una tarde por la plaza del Cuzco, siéntate a la vera de su fuente y distinguirás entre cuzqueños, entre las decenas de argentinos hippies (muchos realmente insoportables), unos cuantos chilenos y de esa pléyade de "gringos" -que vienen dispuestos a ser estafados, bricheados, etc-, a unos curiosos especímenes: los limeños.
Contrariamente a lo que creemos los hijos de esta tierra, lo primero que nos delatará será nuestro "acento". Sí, querido limeño, tenemos acento, un acentazo como doliente, como que rogamos por algo y las mujeres, muchas, además un extraño alargamiento de la sílaba final. Pero lo que realmente suele llamarme la atención es la manera como nos vestimos para ir al Cuzco, porque, el Cuzco es una ciudad, no el campo. Tiene universidades, empresas, negocios, etc. Siin embargo, casi como esos gringos que para venir a Sudamérica vienen disfrazados de Indiana Jones o su variante millenial, nosotros nos vestimos como si fuésemos a escalar el Himalaya. Ya, es verdad que el frío cuzqueño puede ser más intenso que el de la Costa -aunque este invierno me esté haciendo dudarlo- pero echa un vistazo a todo tu outfit: la casaca Northfake, abajo otra chaquetilla de polar o algo así de una marca similar, las botas de montañista, tus medias ochenteras cual escarpines, todo...
Y es que esa es la forma como imaginamos la Sierra: rural, el campo, las montañas, aunque en el fondo no nos movamos de un par de discotecas cusqueñas. Es decir, bien podrías haber venido vestido como en Lima con algo más de abrigo y ya; pero no, ir al Cuzco, a la sierra en general es asistir a un pedazo de nuestra imaginación geográfica que poco tiene que ver con nuestros hábitos usuales del vestido, del comportamiento, etc. Jamás vi en Lima a nadie tomarse una foto con una "niña andina" como lo vi en Cuzco y no ha sido porque no haya niños dispuestos a recibir one dollar por una foto en Lima, pero es que en Cuzquito (cada vez que escucho eso de "Cuzquito" me suda la espalda) es más cute. Ahora, sólo para que calcules la violencia de este acto, ¿te imaginas que alguien del Cuzco -Ayacucho, Huancavelica, Cajamarca o hasta de Chimbote- viniese y te pidiera tomarse una foto con tu hijita, tu sobrino, o lo que sea en Larcomar para subirlo a Instagram o al Facebook? ¿Hardcore, no?


FRED ROHNER
Historia Secreta del Perú 2

as it is when it was

sonido es sonido

sonido es sonido

pura miel

nogzales der wil

RETROMANÍA

"...Pero los 2000 fueron también la década del reciclado rampante: géneros del pasado revividos y renovados, material sonoro vintage reprocesado y recombinado. Con demasiada frecuencia podía detectarse en las nuevas bandas de jóvenes, bajo la piel tirante y las mejillas rosadas, la carne gris y floja de las viejas ideas... Pero donde lo retro verdaderamente reina como sensibilidad dominante y paradigma creativo es en la tierra de lo hipster, el equivalente pop de la alta cultura. Las mismas personas que uno esperaría que produzcan (en tanto artistas) o defiendan (en tanto consumidores) lo no convencional y lo innovador: ese es justamente el grupo más adicto al pasado. En términos demográficos, es exactamente la misma clase social de avanzada, pero en vez de ser pioneros e innovadores han cambiado de rol y ahora son curadores y archivistas. La vanguardia devino en retaguardia." SIMON REYNOLDS Retromanía

kpunk

las cosas como son

las cosas como son

las cosas como son II

las cosas como son II