Todo trato que no eleva...

Universidad Antonio Ruiz de Montoya
Introducción a la Filosofía

Proposición:
“Todo trato que no eleva, rebaja” (Friedrich Nietzsche)

Razonamiento Argumentativo:

Para un filósofo mantener la mente elevada –es decir fuera de las distracciones comunes, simplonas y mundanas- es algo fundamental. Digo esto porque pienso que sólo de esta manera uno puede llegar a ser un genuino filósofo, esto es un verdadero amante de la sabiduría. De lo contrario sólo tendríamos a lo que suele llamarse “poseros” o, en el mejor de los casos, eruditos.

Llamo poseros a los que acumulan cierto saber sin sentirse en verdad inclinados por ningún tipo de filosofía en especial y viven como si sus conocimientos sólo fueran un accesorio bonito en su “estilo de vida”.

Creo que Nietzsche nos dice que debemos mantenernos bien en alto y no ser como hormigas que sólo ven el suelo, lo social, lo rutinario. Debemos ser como cometas, que las estrellas sean nuestro hábitat. Desgraciadamente, como también afirma el propio Nietzsche: “Todo trato que no eleva, rebaja. Por ello el hombre desciende cuando se casa y la mujer, por el contrario, asciende”.

Pienso que el hecho de relacionarse con una mujer de manera formal es para un hombre un acto que lo denigra, pues ellas tienen las raíces bien metidas en la tierra, no sirven para volar y creo, firmemente, que el hombre está hecho para conquistar terrenos aún inexplorados. Por ello el genuino filósofo es siempre un ser solitario, sólo existe con amigos o compañeros de vuelo. Y es que el grueso, o el 99,9% de las féminas piensan sólo en ser madres, tener una familia o en conquistar a un hombre. Pocas son las mujeres que realmente pueden ser consideradas filósofas y no incluyo en este marco a las denominadas poetisas de lo femenino que lo único que hacen es justificar el abrirse de piernas. Y es que estas poetisas viven y son sólo por la lascivia que tenemos los humanos.

Por todo lo dicho creo que la proposición nietzscheana arriba mencionada es un perfecto lema a seguir para cualquier hombre que quiera ser digno de llamarse como tal. No por gusto similares opiniones han tenido Schopenhauer, Aristóteles, etc. No por gusto no podemos hallar en toda la historia de la humanidad féminas equiparables a un Platón, un Rimbaud o un Lautréamont, por nombrar sólo unos pocos nombres de unas pocas áreas del saber humano.

“Toto trato que no eleva, rebaja” es pues, sin duda, un gran consejo dado por un genial filósofo que pocos saben valorar en su justa dimensión.

                                                                                   Wilder Gonzales Agreda.