Expropiado del Facebook de Andrea Patriau Hildebrandt
... Conozco al menos dos personas de mi promoción, con Phd y tan o más brillantes que alguno de los "mártires de la investigación PUCP" que nunca tuvieron acceso a pelear por alguno de los dichosos bonos. Eran bonos otorgados a dedo, fin de la discusión. El que hagan buen uso de él no los exime de responsabilidad, pues al lavarse las manos y decir "yo no sabía nada pero me merecía mi bono porque soy lo más" solo perpetúan el paradigma que los colocó en ese lugar de privilegio. Más lamentable es el eco hipócrita y sobón de todos los que van de lamesuelas a reafirmar que pobrecitos, que por qué los acusan de corruptos. Corrupción no solo es aceptar dinero mal habido, corrupción es aceptar ayudas que sabes que no se les está ofreciendo a todos los que están en tu misma condición. Corrupción es no decir nada en seis años de recibir un bono (por más que cumplieras con los compromisos asumidos) cuando sabes que tienes colegas de tu misma edad y con tanto potencial como tú, y no mover un dedo para que tengan la misma oportunidad que tú. Corrupción es hacerte de la vista gorda cuando sabes que todas o casi todas las contrataciones de profesores se negocian antes de los concursos, que resultan siendo un saludo a la bandera porque todo se negoció por mails y reuniones entre amigos. Corrupción es escandalizarte ante el reclamo justo de colegas sistemáticamente ninguneados y acusarlos de ser malintencionados, y encima increparles que por qué no dijeron nada cuando sabes perfectamente que las cosas se manejan por "padrinazgos" porque siempre te has manejado en ese juego. Corrupción es no ver más allá de tu ombligo y decir como un o una imbécil que qué pena que no se manejara de manera transparente pero ojo que yo sí me lo merecía. No, señores investigadores, no queremos escucharlos decir que son lo máximo y que se merecían su bono. Queremos escucharlos deplorar esas prácticas feudales...
Extraído de la columna "Soy profesora universitaria" de Rocío Silva Santisteban en "La República"
https://larepublica.pe/politica/1377975-profesora-universitaria
...Hoy, la universidad se piensa como una fábrica de profesionales —con maestría eso sí— para poder ser funcionales al neoliberalismo y trabajar sin discutir, sin cuestionamiento crítico, en empresas privadas, grandes consorcios, o incluso para ser funcionarios del Estado en estado puro o burócratas internacionales. Por eso la cantidad de capacitaciones que no pasan de dar instrucciones para aplicar protocolos, normativas y estructuras que vienen con marca de fábrica llamada Banco Mundial, por ejemplo.
Es increíble cómo en ciertos espacios académicos se soslaya la búsqueda de nuevos horizontes por permanecer bajo una pátina de discurso homogéneo, pulcro, impoluto, despolitizado. Si lo dices con un PhD, ¿te deben de creer? Y si es con terno, ¿más aún? Convertir a la universidad en un residuo de individuos peleándose y exhibiendo sus “papers” —usualmente autorreferenciados y megalómanos— en revistas indizadas es un espectáculo que me deprime, me molesta, me choca, me enfurece. Las universidades con vuelo, están al tanto que deben establecer vínculos fuera de sus muros, no solo por responsabilidad social o solidaridad, sino para ¡ensanchar sus fuentes de conocimiento porque es imprescindible enfrentarse a otras ontologías!...
"El rector de la Pucp, Marcial Rubio, ha renunciado después de una semana horribilis en la que descubrimos que en los últimos seis años la universidad había violado la ley efectuando cobros excesivos a sus clientes, perdón, alumnos morosos. Rubio aseguró haber incumplido ese decreto sabiendo lo que hacía. Ninguna de sus excusas podría considerarse digna de ser dictada en una clase de derecho en el claustro, como no sea para demostrar lo que no debe hacerse. La universidad atraviesa una de las peores crisis de su historia, toca una reestructuración de arriba a abajo y quizá una auditoría externa. El caso es ejemplar para seguir conociendo el estado de nuestras instituciones y sus representantes, y para conocer de qué manera se ha perdido la ética hasta en los lugares en los que nos enseñaron lo que era la ética" (GABRIELA WIENER)
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