En Vanguardia Peruana iniciamos una serie de entrevistas a locutores peruanos con preguntas estandarizadas y explícitas para los dedicados a ese oficio de la palabra. Locutores de diferentes épocas de la Radiodifusión Peruana que han dejado un legado y responden cada uno de ellos a micrófono abierto. Esta vez responde Javier Lishner quien reside desde hace años en Estados Unidos.
X: HELENE RAMOS
Con Javier Lishner me une una gran amistad de años que no se ha perdido ni con la distancia. La música de x medio, conciertos, discos, revistas... idas y venidas dentro de las oficinas de Radio Miraflores y él, solicito siempre, no dudó nunca en enviarme material desde el extranjero, durante el inicio del programa que conduje en la estación mencionada. Fue el gran instigador además, para que me animara a producir un propio programa radial y no seguir ya más produciendo programas para otros. Valoro todo ello y, modestamente, el programa no defraudó. He aquí el locutor, animador y, sobretodo, el amigo que siempre está allí e incansable promotor de este blog x donde va como vía on line.
¿Cómo empezó todo ello en cuanto a tus inicios en la locución?
En un concurso en el que me inscribí. Cuando llegué ya se habían cerrado las inscripciones pero me quedé con unos muchachos más conversando en la puerta de la radio. Hablamos de música, de Styx (que estaba muy de moda), de Deep Purple y hasta de Julio Iglesias… De pronto, salió la secretaria y nos hizo ingresar. Fuimos los últimos de 492 inscritos. Radio Miraflores en Alcanfores 592. Año: 1980. El resto es historia.
Menciona todo tu historial dentro de las emisoras locales conduciendo programas y/o en TV.
Creo que a pesar de que estoy retirado hace 25 años (mi despedida fue en 1994), es demasiado. Pasé por Radio Panamericana, regresé dos veces más a Radio Miraflores, trabajé en Radio Nacional con un programa llamado Por los Caminos del Rock (paralelamente a Radio Miraflores). Luego ingresé a la televisión para conducir Mirando la Radio del naciente Canal 13 y al año siguiente en Fantástico por Panamericana Televisión. Por esos días trabajé a la vez en el diario Expreso con una página llamada En Stereo y otra de Juventud, y colaboraba con un par de revistas de música. También andaba en Radio 1160 con El Lado Oscuro de la Radio. Era un programa semanal y allí, cada sábado a las seis, transmitía todo lo que la(s) radio(s) no pasaba(n). Fue una linda experiencia. Después, me fui a Ica a dirigir Radio Efextos FM que acababa de salir. A mi regreso, en 1992, y por sugerencia de nuestra inolvidable Dianita García de Palacios, volví por tercera vez a Radio Miraflores. Y ‘sin querer queriendo’ me despedí en la misma emisora en la que inicié mi carrera.
¿Quién ha sido tu más grande inspiración para que te dediques a ese oficio de la palabra? ¿Qué personaje radial peruano merece tu respeto a través de los años?
Definitivamente que la música fue mi mayor inspiración. Llegué a ese concurso sin quererlo ni buscarlo, pero el hecho de que lo organizara Radio Miraflores me llamó rápidamente la atención, desde que escuché el aviso promocional en la voz de Pedro Roncallo. Personajes radiales que merecen mi respeto hay muchos. Iván Márquez, Lucho Argüelles, Johnny López, Diana García de Palacios, Nelly Mendívil, Pepe Barreto, Pedro Silva, Walter Gonzales, Perico Durán, Tony Marbel, y, entre tantos más, el padrino del concurso de aquel 1980: Enrique Llamosas. Ah, y mi hermano Sammy Sadovnik, quien triunfa en el campo deportivo en los Estados Unidos.
¿Qué ha sido lo más apreciable para ti durante todo el tiempo en que te dedicas o has dedicado a este oficio?
Algo de lo mejor, porque hubo muchísimas cosas positivas, fueron los viajes. Tanto al interior del Perú como afuera. Recorrí costa, sierra y selva, por diferentes eventos. Viajé por el Perú con la Más Más de Panamericana (1983-85), con la gira de Perú Rock (1988), con el elenco de Fantástico (1990) y también con seminarios de locución con la Asociación Talentvs (1992-94). Todo esto muy aparte de los eventos para los cuales me llamaban para presentar. Fue mucho. Fue hermoso. No lo cambio. Afuera pude asistir a varios eventos. Ver a Rolling Stones en el 1989 fue pleno. A Bob Dylan, etc. Participar del primer Rock in Rio, en 1985, fue una gran experiencia. Y regresar en 1991 por el segundo, aún más.
Si pudieras estar eternamente ligado a un año de la escena musical ¿qué año podría ser este?
Si te refieres a uno de mi carrera… Posiblemente a 1985. Porque, amén de Rock in Rio, junto a Sammy Sadovnik organizamos Unidos. Ese fue un proyecto para aliviar el sufrimiento de los niños huérfanos por el terrorismo de Ayacucho. Se unieron muchos músicos y cantantes, y se hizo un disco cuyas ventas fueron a casas-hogares en Tambo, Huanta y Huancapi. El año 1994 también fue importante. Porque me despedí muy feliz de lo que hasta entonces había hecho. Lo hice por voluntad propia y cuando estaba ganando más dinero que nunca antes desde 1980.
¿Algún estilo musical no obtuvo la atención, que esperabas que sí la obtendría?
Yo siempre transmití rock, pop y baladas. Nunca hubo problema con eso. En 1986 comencé, también con Sammy, Perú Rock. Y ese, por decir así, fue un riesgo. Porque la escena de la música no pasaba su mejor época. Se escuchaba rock en español pero principalmente de España y Argentina. Algo de Chile (Prisioneros, por ejemplo). Iniciar un programa con contenido netamente nacional no fue fácil. Pero luego llegó la ola y tuvimos la suerte de estar allí. Desafortunadamente, la ola terminaría relativamente pronto cuando sucedió el ‘paquetazo’ del gobierno de turno. Y todo se fue a la eme.
Javier Lishner con GIT
Yo siempre estaré de acuerdo con lo que sucede con los locutores peruanos. Siempre ha habido buenos, mediocres y malos. Casi como en cualquier actividad. Creo que la Asociación de Locutores (esto es un decir, porque hay como tres. Aunque también podría ser, incluso, algo positivo); decía, creo que la Asociación o asociaciones, tienen allí un trabajo permanente. En brindar clases, seminarios, talleres prácticos, etc. para mantener a los asociados en constante aprendizaje. Porque muchos se quedan en el pasado. A veces he escuchado, y no lo digo en son de crítica sino de ejemplo, a locutores que, treinta años después, continúan diciendo lo mismo. La lengua, sólo para comenzar, está en constante evolución. Deberíamos tener en cuenta que ahora, luego de tres décadas, hay dos o hasta tres nuevas generaciones con diferentes modos de vida, costumbres, expectativas, experiencias, etc. La voz hay que cuidarla. Pero el cerebro, aún más.
¿Es que se puede vivir adecuadamente siendo un locutor en el Perú?
Honestamente, no sé. No vivo en el Perú desde hace mucho. Lo que sí me agrada es cuando veo locutores que ‘salen’ de sus cabinas para hacer sus negocios paralelos. Por lo que veo a lo lejos, les va bien. Pero supongo que no es el gran porcentaje. Me encantaría saber la realidad del locutor promedio en Perú. Y ojo que el Perú es mucho más que Lima. Entonces habría que medirlo por área. Los que saben de estadística lo entienden muy bien. Sólo que las estadísticas deberían ser hechas por gente seria y no solo negociantes. Detesto las encuestadores, los surveys, los ratings, la mermelada.
¿Qué habilidades hace que un locutor tenga un estilo único?
Creo que cada quien tiene una personalidad. Antes, y no quiero decir que antes fuera mejor; pero, antes, la radio dejaba que nacieran personalidades. Hoy, no. Hoy pareciera que se hicieran en masa. Con excepciones, claro está. Tanto en radio como en televisión, todavía se puede ver a quiénes más destacan. Aunque también allí hay manipulación. Las caritas ‘bonitas’, por ejemplo… Se ve aquí, allá y acullá.
¿Diferencias tu estilo de locución con la de otros locutores? ¿En qué sentido?
Por supuesto. Y quisiera decirte un par de cosas. La primera, que tuve la suerte (y lo digo como algo muy personal) de iniciarme con el estilo de personas como Gerardo Manuel, Liliana Sugobono y Hugo Salazar. Ellos estaban en la FM de Miraflores, en donde tuve mi primer programa. Y ellos, los tres, cada vez que se dirigían al público, lo hacían conversando. No gritaban, no exageraban. Eran muy espontáneos y, además, con conocimiento de lo que presentaban. No había Google ni Facebook ni nada de eso… Cómo son las cosas, ahora tengo a esos a la espalda de mi casa. Aquisito nomás, en el Silicon Valley. Así que, principalmente, de ellos tres aprendí. A Gerardo y a Liliana los había escuchado desde siempre y a Hugo lo había conocido mientras estudiábamos en la Universidad de Lima. Lo otro, que también tiene relación a tu pregunta anterior, sucedió en 1983. En mi primera entrevista con la gerente -y a la vez dueña- de Radio Panamericana, me dijo: “Y tú serás el último que venga de Radio Miraflores. Ya llegaron Lucho (Argüelles), Johnny (López) y ahora tú, y no queremos que la gente piense que no podemos formar a nuestras propias estrellas”. Tal cual. Y por primera vez me dijeron estrella... ¡ ja ja ja! Aunque luego, de allá, también llegaría Sammy Sadovnik. Así que eso de “estrellas” o “figuras” aún existía. Pero si hasta las mismas radios nos promovían en páginas enteras en diarios y revistas. Nos hacían artes gráficos y todo… Y eso evidentemente ayudaba a que cada uno tuviera su propio estilo. Aunque eso luego desaparecería.
¿Cuál es el tema que consideras vigente para ti, a pesar del tiempo transcurrido?
Si te refieres a un tema musical, no tengo. Creo que la música siempre estará vigente. Si te refieres a algo general, el aprendizaje. Como la canción de Sui Generis: “No quiero estar sin poder crecer… Aprendiendo las lecciones para ser...”.
¿Qué tema que haya alcanzado el Top 1 consideras insoportable para ti?
¡Ja ja!. Supongo que muchas. Sobre todo ahora que ya estoy viejito. ¿Alguna de Bon Jovi?
¿Es que se puede definir el perfil de un locutor x pasar un determinado tipo de música?
No, no lo creo. El locutor debería ser, como dicen ahora, ‘todo terreno’. Lo importante es prestarle atención a cada cosa que haya que presentar o tema que se tenga que tratar. Es decir, estar preparado. Porque, aunque no les guste a muchos de mis colegas, voz tiene cualquiera...
Si tuvieras el poder de abolir un estilo de música ¿cuál de ellos desecharías x toda la eternidad y x siempre jamás?
Ninguno. Rechazo esos tipos de abolición. Y habiendo estado cerca a la música por casi 50 años (los cumpliré pronto, desde que empecé a escuchar radio), sería como ir en contra de mi propia esencia.
¿Difundirias el reggaeton si estuvieras ahora mismo, trabajando en alguna emisora?
Si estuviera, si estuviera... Si estuviera entre el sol y la luna. Si estuviera loco o cuerdo. Si estuviera de nuevo entre las doce y la una. (Horario de Perú Rock)
Agradezco tu gran amabilidad para esta entrevista y ambos sabemos que no vamos a abandonar nuestro gusto x la música. Javier, ha sido también quien me presentó a Juan Alberto Matta, con quien he intercambiado mucha música francesa y él fue un gran cómplice con cantidad de revistas sobre Indochine, el grupo que se convirtió en la primera entrevista que hice. Gracias de nuevo x todo a ambos, calles de Miraflores caminamos juntos.
Helene, un gran abrazo para ti y tus lectores de Vanguardia Peruana. Eres una de esas leyendas que dejé en el Perú durante la década noventera. Incólume es la palabra para definirte mejor. Íntegra. Siempre coherente. Sana y viva, por siempre.
Javier Lishner con Dale Bozzio (MISSING PERSONS)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario