En los 90 si eras curioso y no te dejabas estafar por los ídolos de barro de siempre -si no eras un huevón más como diría Juan Hipno- podías tocar el cielo y escuchar bandasas. Harto hemos hablado en este blog sobre la cantidad de discos y grupos que escuchamos esos años cuando nadie en Lima daba un centavo por los sonidos de la vanguardia, el post-rock y/o el arte sonoro. Una de esas entidades que disfrutamos en tiempo real fueron los Jessamine del roster del sello Kranky.
Jessamine provenían de Seattle (USA) y ello se sentía en su disco debut de 1994. En las canciones se filtraban armonías, bajos y distorsiones en sintonía con los grupos grunge de esa ciudad. En contraparte su devoción por héroes como Spacemen 3 y Silver Apples convertía su sonido en una especie de mutación contranatura. Una verdadera rareza del post-rock americano.
Jessamine iría dejando su filiación grunge y hasta hicieron splits con Spectrum y E.A.R. repleto de atmósferas espaciales y minimales drone. Su sonido cambió por completo hacia la post-psicodelia de matiz esquizo como lo prueban sus discos posteriores. Ideales para fans de Suicide, Morton Subotnick o Bardo Pond. Su debut del 94 quedará en la Historia de la Música como el momento en que 2 movimientos opuestos se encuentran, copulan y producen una genial barrabasada.
Inolvidables: "Ordinary Sleep", "One Trick Pony" y "You have ugly talents, Martha". Kranky phorever.
Wilder Gonzales Agreda.
El primer 7 pulgadas de Jessamine para Sub Pop (1994) y el autotitulado debut, se basó en el mejor shoegazer americano y británico, el drone rock y el noise pop de la media década anterior a esta formación de la banda de Seattle en 1994, y luego añadió una fascinación igualmente ferviente con los dos álbumes lanzados por el dúo de bizzaro-psych / musique concrete rock estadounidense Silver Apples de 1969 a 1970 (Jessamine coverea "A Pox On You" de esa banda) y también revela una clara afinidad por la escena Krautrock de Alemania de los 70 y compositores avant como Morton Subotnick y John Cage. Pero este álbum equilibra estas largas miradas en el espejo retrovisor con una visión para mover el indie rock experimentalmente motivador hacia el futuro. El disco es el más estructuralmente orientado al rock de los varios títulos de Jessamine lanzados durante la década de los 90, y tiene el potencial de atraer a una amplia gama de gustos específicos: indie, underground, noise, drone, ambient, electro y la alucinante formación de micro-inquietudes que surgieron en los últimos veinte años. El debut autotitulado de Jessamine es el mejor álbum de los primeros cinco o más años de Kranky como presencia innovadora.
Andrew Earles.
A través de una serie de voces y duetos sin melodías, el álbum debut de Jessamine presenta el noise-pop más intrigante desde que My Bloody Valentine y Medicine estuvieran en su apogeo. Del ruido de textura de la apertura, se podría suponer que el grupo persigue la distorsión por sí misma, aunque las canciones vocales posteriores "Secret", "Royal Jelly Eye Cream" e "Inevitably" incluyen deliciosas piezas de distorsión de la guitarra que acentúan la melodías frágiles excepcionalmente bien. Deslizándose entre el ruido abstracto similar a los compañeros de sello, Labradford y las canciones pop impulsadas por el bajo pueden no ser para todos, pero Jessamine lo hace mejor que la mayoría.
Keith Farley.
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