En el tema que abre su último CD, Terrorista! (2019) una voz robótica lanza frases directas, nacidas
de una indignación natural que contrasta con el ¿ritmo? absolutamente maquinal de
equipos computarizados. Lo artificial sirve de envoltura para una idea visceral,
que brota al pensar en políticos corruptos y telebasura (el título del tema es, por cierto, Me llegas al pincho).
Tras 25 años de trabajo y más de ochenta producciones, como
solista o con proyectos como Fractal, Avalonia, The Peruvian Red Rockets y
otros –la mayoría lanzadas a través de su propio sello Superspace Records,
activo desde el 2003-, Wilder Gonzáles Ágreda (Lima, 1977) es el principal
referente de una movida vanguardista limeña que mantiene sus propuestas ante
públicos ínfimos y nula cobertura masiva.
En tiempos en que los happenings
ya no son noticia para nadie, Wilder instala sus sintetizadores, consolas,
parlantes y PC en una solitaria plaza de Los Olivos y lanza sonidos industriales
y arrítmicos para un público involuntario: señoras que pasean a sus nietos, transeúntes
y uno que otro freak quizás atraído
por esas oscilaciones tan diferentes a los beats
discotequeros asociados a la música electrónica convencional.
Entre los siete temas de Terrorista! destaca La nueva Atlántida, donde la misteriosa voz procesada lee un pasaje de la obra póstuma del filósofo británico Sir Francis Bacon (1561-1626), publicada el año de su muerte. WGA usa un texto escrito hace casi 400 años para describir su propio proceso creativo. En la misma línea de Me llegas… discurre Transgresión y revolución, en la que se refiere a su propuesta como “algo real, alejado de las moscas del mercado”. El uso de samplers, distorsiones y demás, propone una contradicción atractiva y provocadora. “Algunos samplers los bajé de tutoriales educativos de YouTube, para dotar al disco de un aura algo más salvaje, menos hípster”, dice.
Entre los siete temas de Terrorista! destaca La nueva Atlántida, donde la misteriosa voz procesada lee un pasaje de la obra póstuma del filósofo británico Sir Francis Bacon (1561-1626), publicada el año de su muerte. WGA usa un texto escrito hace casi 400 años para describir su propio proceso creativo. En la misma línea de Me llegas… discurre Transgresión y revolución, en la que se refiere a su propuesta como “algo real, alejado de las moscas del mercado”. El uso de samplers, distorsiones y demás, propone una contradicción atractiva y provocadora. “Algunos samplers los bajé de tutoriales educativos de YouTube, para dotar al disco de un aura algo más salvaje, menos hípster”, dice.
Wilder se define como no-músico: “Mi aproximación a la
música es 100% intuitiva. No sé tocar ningún instrumento y mis conocimientos de
teoría musical son inexistentes. Aun así, para componer me guío por lo que me
suena bien y lo aprendido de los discos y/o artistas que me han influenciado”.
Entre esos artistas están Richard D. James (Aphex Twin), Autechre, My Bloody
Valentine, entre otros.
WGA proviene de Crisálida Sónica, colectivo que lanzó en
1997 un disco epónimo, hoy considerado un clásico de la onda vanguardista
nacional. “La
mayoría de los Crisálida Sónica seguimos activos: Hipnoascensión, Catervas, Miguel
Ángel “Chino” Burga, Christian Galarreta y Aldo Castillejos siguen en sus
respectivos proyectos cada quien a su manera” nos cuenta, mientras se
prepara para su próxima presentación en el evento Space Noise Continuum 3. Si
quieres probar sensaciones sonoras verdaderamente nuevas, la dirección es Jr.
Alpamayo 178, Los Olivos (Reverberaxion).
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